jueves, 10 de diciembre de 2015

Despedidas con alioli

Hola vida,
tu prima dice que este año nos toca la lotería, que ya es hora de que nos pase algo bueno y que no paras de cambiarle la hora al reloj de su cocina, que suerte tiene. Ya sabes que si de verdad tocara las primeras personas de las que me acordaría sería tu familia, porque siempre te prometía que si algún día me tocaba la iba a compartir contigo y a diferencia de ti me gusta cumplir lo que he prometido, y a raíz de ti ya no prometo nunca nada.
¿Sabes una cosa? Odio ser tan fuerte. Odio no ser capaz de rendirme, de plantarme. Odio no ser capaz de decir "se acabó", meterme en la cama y no volver a salir hasta dentro de 200 años, porque te juro que es lo único de lo que me quedan ganas. Pero no puedo, algo me impide retirarme, algo me obliga cada día a luchar por oprimir el dolor, por aferrarme a cada pinchazo que siento en el corazón cada vez que late sin tu voz. Hay algo que me obliga a secarme las lágrimas todos los días, que me hace ponerme de pie y practicar esa sonrisa finjida que ya es lo único que me maquilla la cara, esa sonrisa tan falsa como contestar que estoy bien cuando alguien me pregunta. Pero en el fondo nadie lo sabe, nadie puede tener ni puta idea de lo muchísimo que te echo de menos, de lo dificilísimo que es vivir con este dolor en el pecho.
No puedo asumirlo vida, lo siento. No puedo asumir que te has marchado, que ni si quiera te has despedido.
Prometimos no decirnos 'adiós' jamás, incluso inventamos otra palabra, la sustituimos por 'alioli' y joder, me encantaba despedirme de ti con esa palabra, esa palabra significaba que no era una despedida de verdad. Pero lo fue. Lo fue y no lo sabíamos, y pasó de significar 'hasta luego' a un 'hasta nunca'. ¿Hasta nunca vida?, ¿cómo has podido decirme hasta nunca?. Dime cómo coño te has atrevido a marcharte así, a irte sin mí, a dejarme aquí, jodida y desolada por el resto de mis días.
Joder, si yo lo único que quería era tener una puta vida normal, ¿por qué no puedo?, ¿por qué no voy a poder tenerla nunca?, ¿era tanto pedir?, ¿de verdad?.
No te imaginas las ganas que tengo de mandarlo todo a la mierda, porque todo es una mierda inmensa sin ti, que no me apetece hacer nada cada vez que me acuerdo de que tú estás muerto y no lo puedes hacer. ¿Cómo puedes estar muerto grandísimo cabrón?. Hacerme esto a mí, con lo que yo te quería, con lo que te quiero, con lo que te necesitaba... No hay derecho. No hay consuelo.
Nada, nunca y nadie. Esas son las tres palabras que más me representan.
Dolor, frío y rabia las tres sensaciones que siempre me acompañan.
Antes éramos dos, ahora tengo que volver a ser sólo yo y no puedo serlo sin ti, por eso ya no sé ni quién coño soy, ni a dónde coño voy. Pero algún día yo también me moriré y, quien sabe, quizás ese día me vuelva a encontrar si te encuentro junto a mi.
Alioli mi amor.
Te azuleo más allá de la muerte, de la vida, de La Tierra, de Neptuno. Más allá del infinito, del fin del mundo. Más allá.

2 comentarios:

  1. Mi gitano necesitamos k nos toke por k sino me vas a arruinar con los relojes en un mes y medio ya me has parado dos te echo de menos mi niño eras eres y serás mi gitano siempre mi niño mi pekeño necesito pedirte una cosa hazle una señal a tu pelirroja para le un reloj k vea k sigues con ella también mañana voy a verla y le daré un fuerte abrazo por tu mi también te kieroo mi niño

    ResponderEliminar
  2. Mi gitano necesitamos k nos toke por k sino me vas a arruinar con los relojes en un mes y medio ya me has parado dos te echo de menos mi niño eras eres y serás mi gitano siempre mi niño mi pekeño necesito pedirte una cosa hazle una señal a tu pelirroja para le un reloj k vea k sigues con ella también mañana voy a verla y le daré un fuerte abrazo por tu mi también te kieroo mi niño

    ResponderEliminar