domingo, 14 de febrero de 2016

Ojalá lo sepas

Ojalá pudieras si quiera suponer lo muchísimo que te echo de menos. Toda la falta que me haces, lo que significa y supone para mi tener que vivir sin ti a partir de ahora y por el resto de mis días, que no se cuántos días serán pero seguro que muchos. Lo que es levantarse cada mañana sin ganas de vivir, sin una motivación, sin planes de futuro lo suficientemente convincentes como para tener la certeza de que voy a ser feliz en el futuro. Ya no soy feliz, no lo seré nunca. Una vez lo fui, fue la primera vez que me besaste en los labios. La primera vez que te supliqué que me hicieras el amor, la primera vez que me dijiste "te amo". Nunca he sido tan feliz como cuando me miraste a los ojos y me enseñaste todo el amor que tenías guardado para mi de todos estos años, todos los besos que se escondían en tus labios, los abrazos, las caricias en tus manos, las sonrisas, las ganas de vivir. No se cómo seguir sin ti, me parece tan jodidamente imposible que me parece un puto logro cada vez que me levanto de la cama y me pongo a caminar, esperando y deseando que se acabe el día aunque no haya hecho más que empezar. Me faltas en cada segundo, en cada paisaje, en cada experiencia.
Estuve muchos años esperando a que fuera nuestro momento, ese en el que pudieramos estar juntos para hacernos felices para siempre. Y cuando por fin, y después de todo, llegó, te marchas de este mundo, así, sin más. Sin decirme si quiera adiós. Me dijiste 'alioli' y me colgaste como si no fuera la última vez que oía tu voz. Pero lo fue. Y creo que jamás podré perdonártelo, porque jamás podré llenar este agujero tan grande que se ha quedado en mi corazón.
Otro día perdido sin ti que tendría que haber pasado contigo, a tu lado, comiéndote a besos cada segundo, susurrándote lo mucho que te amo, la falta que me haces, la ausencia que dejas si te vas.
Éramos tu y yo contra el mundo, tu y yo para comérnoslo, para hacerle el amor. Éramos tu y yo, pero ya soy sólo yo.
Te quiero, y aunque quizás nunca puedas saberlo te amo, estaba y estoy enamorada de ti hasta las trancas, hasta el último milímetro de mi ser te amaba y te ama, por haber sido único, por haber sido el mejor.
Hasta Neptuno, nuestro planeta azul.

No hay comentarios:

Publicar un comentario